La rectificación de discos y campanas de freno es un proceso que busca corregir las imperfecciones y el desgaste que se producen en su zona de contacto con las pastillas o bandas de freno, con el objetivo de restaurar su capacidad de frenado y prolongar su vida útil. Este proceso se debe llevar a cabo en talleres especializados como en Frenos 7 de Agosto, utilizando maquinaria específica.

La optimización de los discos y campanas de freno se logra mediante la eliminación de cualquier imperfección en la superficie del disco o el interior de la campana, lo que permite una fricción más uniforme entre las pastillas de freno y el disco o las campanas y las bandas de freno, mejorando así el rendimiento del sistema de frenos.

El modo de uso de los discos y campanas de freno rectificados es el mismo que la pieza nueva. Es importante tener en cuenta que con la rectificada pueden las campanas y las bandas ser menos resistentes al calor que los si fueran nuevos, por lo que es recomendable evitar frenadas bruscas y prolongadas que puedan generar excesivo calor.

Entre las generalidades y recomendaciones para la rectificación de discos y campanas de freno se encuentran:

• La rectificación debe ser realizada por un taller especializado y utilizando maquinaria específica. En Freno 7 de Agosto contamos con la maquinaria y tecnología adecuada.
• Es importante verificar el espesor mínimo permitido para los discos y las campanas de freno antes de proceder a su rectificación.
• Los discos y campanas de freno rectificados deben ser limpiados cuidadosamente antes de su instalación.
• Es recomendable reemplazar las pastillas de freno al mismo tiempo que se rectifican los discos, igualmente, las bandas con las campanas de freno para obtener un mejor rendimiento y evitar el desgaste desigual.
• Es importante seguir las recomendaciones del fabricante y técnico automotriz en cuanto al uso del sistema de frenos y el mantenimiento.

La frecuencia con la que se deben rectificar varía según el uso del vehículo y las condiciones de conducción. En general, se recomienda llevar a cabo una inspección visual de los discos y campanas de freno cada vez que se realizan cambios de pastillas o bandas de freno para determinar si necesitan rectificación. En condiciones de uso normal, los discos y las campanas pueden durar de 30,000 a 70,000 kilómetros antes de necesitar ser rectificados. Sin embargo, si se conduce en condiciones más exigentes, como en zonas montañosas o con carga pesada, puede ser necesario rectificar con más frecuencia. Es importante seguir las recomendaciones del fabricante del vehículo para determinar cuándo se debe realizar la rectificación.